EL PROBLEMA CON LA INTERSECCIONALIDAD

Nuestro mundo ha cambiado para bien en el último siglo, por más que nuestros padres y nosotros mismos repitamos que los tiempos de antes eran mejores, hay una realidad, y es que hoy vivimos mejor que ayer (Hablo del mundo en General, para los que vivimos en Venezuela). En 1800, más del 90% de la población mundial vivía con menos de 1 dólar al día (en términos reales). hasta 2019, antes de la pandemia por la Covid-19, la pobreza mundial se encontraba por el 10% de la población mundial. es decir, en 200 años se revirtió el panorama de la pobreza extrema, aun cuando la población creció en mas del 700% en los últimos dos siglos. todo esto, gracias a la creación de riqueza emanada de la capacidad creativa del ser humano, que a su vez, fué impulsada por el sistema capitalista que logró desarrollarse en el siglo XVII-XVIII con la Revolución Industrial.

Ademas, no solo se incrementó nuestro nivel de vida, también aumentó nuestra calidad de vida, en tanto que crecían nuestras libertades como individuos. fue así como nacieron movimientos en contra del racismo, a favor del feminismo y la identidad de genero. movimientos que fueron justificadamente incentivados y motivados. hoy en día, nuestra sociedad es más tolerante y abierta (Sociedades Desarrolladas), sin embargo, hay lastres culturales y ortodoxos que atañan a algunas personas aún, por ello la necesidad de éstas minorías seguir luchando por su inclusión igualitaria en la sociedad.

El problema real llega cuando tales movimientos legítimos se ven infiltrados e intensificados por grupos criminales cuya agenda se alinea con la de la izquierda internacional, buscando desestabilizar las democracias prosperas de occidente. Y no quiero caer en malinterpretaciones, o que me malinterpreten. No es que sea homófobo, no es que sea racista, no es que sea Machista. Me molesta que los socialistas se aprovechen de la condición social, racial y étnica de una minoría para imponerla sobre la mayoría. aunado a eso, generar Caos, justificándose en la defensa de derechos y libertades de esas minorías (que respeto) Pero que no me pueden imponer a la fuerza como si se tratase de un condicionamiento de vida.

Esa siempre ha sido el arma de la izquierda. La supuesta ''superioridad'' moral les da patente de corso para hacer lo que les venga en gana en pro del bien común. es decir; el problema no es buscar igualdad en el genero femenino respecto al masculino, sino alterar la naturaleza de la mujer y tratar de imponerla en la sociedad tomando el papel del hombre. el problema no es buscar tolerancia y respeto por tus preferencias sexuales, el problema es imponer la bandera LGTBIQ+ por sobre todas las cosas con el impuesto de todas las personas y dar preferencias a quienes pertenezcan a esa minoría. el problema no es buscar no ser discriminado por tu raza o color, sino condenar y agredir a todo aquel que no lo sea, además de convertir el movimiento en una organización que genera caos y terror, caso reciente en USA con la muerte de George Floyd y Black Lives Matter.

Dentro del pensamiento liberal con el cual me identifico, se busca la libertad del individuo de eligir el destino de su propia vida, en el que éste construya un futuro de prosperidad, sin que en el proceso afecte la libertad e integridad de otras personas. es decir, se toma al individuo como igual ante el estado y la ley, sin tomar en cuenta su raza, etnia, religión o preferencias sexuales, siempre y cuando, en la practica de éstas no afecte la libertad de otros individuos. 

Quiero compartir con ustedes una reflexión vía twitter de Pedro Urruchurtu (@urruchurtu), Politólogo y profesor de la Universidad Central de Venezuela, y Coordinador de Formación de Vente Venezuela, donde explica desde un punto de vista liberal el problema con la interseccionalidad:

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''Los liberales luchamos para que a cada cual se le permita ser quien es, amar a quien quiera y vivir como prefiera, teniendo plenamente en cuenta que esas libertades han de defenderse mientras no violen los derechos de los demás. Así lo recoge la Internacional Liberal. Y es que la búsqueda de la felicidad ha sido y sigue siendo un empeño básicamente individual. De ahí que los liberales concibamos los derechos humanos como individuales y nunca como colectivos y defendamos el respeto al proyecto de vida de cada quien. Por ello, el manifiesto de la Internacional Liberal afirma que ser liberal se trata de la libertad que uno puede ejercer para vivir la vida que considera valiosa, sin limitar la libertad de los demás. Vida, libertad y búsqueda de la felicidad, incluyendo la propiedad, para todos. Por eso creemos en la igualdad ante la ley y no en los privilegios o en la cuotas, porque la dignidad del ser humano no radica en su condición, sino en su existencia sin importar el proyecto de vida que decida tener, siempre que no atente contra el proyecto de vida de otros. Y de ahí que sea tan importante no sólo hablar de tolerancia, sino también de respeto. El respeto supone la no intromisión en el proyecto de vida ajeno y el dejar vivir mientras no afecte a otros; la tolerancia supone aceptar, pero no siempre respeta las decisiones individuales. El mundo será más libre y justo cuando todos puedan disfrutar plenamente de sus derechos individuales: vida, libertad y propiedad. Eso no se logra con privilegios ni imponiendo agendas, sino educando y preservando la igualdad ante la ley, la única que nos puede hacer iguales. Pero el mundo también será más libre y justo cuando a cada quien se le considere por su esfuerzo, por su mérito y por sus capacidades, antes que por lo que decida ser o a quien amar. El respeto a la dignidad y valorar al ser humano no debería depender de sexo, raza, religión, etc. los liberales queremos que cada quien sea dueño de su destino, libre de vivir como quiera y responsable de esa libertad, asumiéndose que vive en sociedad. No queremos víctimas ni victimización, sino desarrollo pleno desde lo individual, sin importar lo que decidas ser''.

En conclusión, no busco cercenar movimientos que buscan mejores condiciones de vida para el individuo, sino fomentar la igualdad de todos sin detrimento de su raza, sexo o religión para no caer en la exclusividad o preferencialidad. toda búsqueda por más libertades y una sociedad tolerante y respetuosa es legítima en cuanto no afecte la libertad y el ejercicio de las demás personas.

Por: @ividess